Translate

miércoles, 13 de noviembre de 2013

4 DORADAS EN 1 HORA

Todo pescador con el paso del tiempo va conociendo a muchos entusiastas por este deporte, verdaderos apasionados,  entre los cuales me incluyo, que no nos pesan tanto el frío, los madrugones, las caminatas,  y las horas y horas a pie de playa...Era sábado por la mañana y ninguno de estos pescadores amigos mios pudieron acompañarme, quería estar con los cebos preparados antes del amanecer, así que a las 6 de la mañana ya íba el carro cargado rodando por la arena mojada de la playa con mi mejor compañero de pesca, el de siempre, el más fiel, mi novia. Aprovecho aquí para agradecérselo y no solo por el madrugón porque ahí no queda la cosa...
Empezaba a amanecer y ya tenía mis cañas recien lanzadas, mi novia en la tienda de campaña dormida, yo sentado en la silla  medio dormido aguantando el típico frío mañanero cuando escucho el bendito detector de picada, el cebo que puse en esa caña era una catalana tan bien presentada que casi apetecía morderla uno mismo. Aviso a mi novia y esta sale de la "quechua"